Para este protocolo hay que hacerse como un saco de dormir con bolsas de basura grandes, de manera que nos permita introducirnos en el interior del saco quedando todo tapado salvo la cabeza que deberá permanecer fuera del saco para evitar respirar los vapores. Nos deberemos meter dentro de la bolsa en ropa interior para dejar la mayor parte del cuerpo expuesta a los vapores.
Activaremos unas 30 gotas de MMS en un vaso pequeño, pero NO le añadiremos agua. El objetivo es que nos demos un baño en los gases que se desprenden de la activación del MMS. Nos meteremos en el interior del saco e introduciremos también el vaso con el MMS activado sin agua, cerraremos el saco ajustándolo al cuello de manera que los gases permanezcan en el interior del saco. Permanecer así no más de 15 minutos. Puedes permanecer de pie o sentado, siempre y cuando la zona en la que deba actuar no sea la parte por donde nos sentamos ya que si no los gases no llegarán con facilidad a esa zona.
También puede utilizarse este protocolo para pequeñas zonas de nuestro cuerpo. Esto se hará con una pequeña bolsa que abarcará la zona a tratar (ver protocolo de gas) o con un vaso con la boca del tamaño que abarque la zona a tratar. En este caso hay que evitar que el líquido toque la piel.